Resumen:

Si bien la carta magna en su articulo 67, está tipificado el derecho a la educación, la realidad colombiana es otra. Muchos son los obstáculos que encuentran los niños y jóvenes para acceder al sistema educativo,. desplazamientos, falta de docentes y centros de enseñanza, precariedad en las plantas físicas, violencia, carencia de una cultura educativa en las familias, entre otros. Y esta realidad no es diferente en la educación superior, en la cual la necesidad de vincularse al mundo laboral de forma rápida, o en los diversos fenómenos sociales afectan el ingreso y la permanencia del sistema educativo.

Durante mucho tiempo, el Estado colombiano, dentro de su filosofía de estado proveedor, ha venido desarrollando programas educativos o de patrocinio para jóvenes en condición de vulnerabilidad económica y social. Dos preguntas rondan estas políticas: la prima es respecto al impacto de estos programas en el desarrollo económico y social de los beneficiarios. La segunda respecto al impacto de estos programas e el desarrollo económico y social del país. Esta reflexión pretende abordar estos dos tópicos, a partir de la realidad nacional.